ARGEL, 15 de mayo (NNN-PRENSA LATINA) — Miles de estudiantes salieron el martes a las calles de esta capital por decimotercera semana consecutiva para reclamar cambios en el sistema político, mientras el Gobierno interino mantiene firme la celebración de elecciones el 4 de julio.
Como cada martes, desde el pasado 22 de febrero, jóvenes universitarios y de otros sectores se movilizaron en forma pacífica aquí y en otras ciudades del país en demanda de un cambio de régimen y, en especial, abogaron por que sus principales figuras abandonen el poder.
Cánticos para exigir la salida del presidente interino, Abdelkader Bensalah; y el primer ministro, Nouredin Bedaui, se escucharon durante las marchas, a la par que otras consignas cuestionaron al jefe del Estado Mayor del Ejército, Ahmed Gaid Salah.
Con anterioridad y presionado por las movilizaciones renunció al cargo el presidente del Consejo Constitucional, Tayez Belaiz, los tres reconocidos como muy cercanos al exgobernante Abdelaziz Bouteflika, quien dimitió el 2 de abril también obligado por las presiones callejeras.
Otros mensajes rechazaron las elecciones presidenciales previstas para el 4 de julio, las cuales el Gobierno considera vitales para destrabar la compleja situación política que atravieza el país.
En mensaje a la nación al iniciarse el mes sagrado del Ramadán, Bensalah aseguró que ‘un diálogo lo más amplio posible, inteligente, constructivo y fidedigno sigue siendo la única forma de lograr un consenso fructífero’.
El mandatario manifestó que garantizar ese diálogo permitirá crear las condiciones necesarias para la celebración, en los plazos acordados, de los sufragios.
En un artículo publicado este martes el periódico El Moudjhaid señaló que los comicios preocupan a gran número de políticos ‘cuyos análisis divergen’, pero también a los expertos en derecho constitucional.
El diario oficialista manifestó que la actual etapa en el país está caracterizada por ‘una dinámica de manifestaciones pacíficas’ para lograr el triunfo de las ‘libertades democráticas’ y de una ‘justicia de calidad’, que redunden en la consagración de ‘una era de gobernabilidad’.
Para el periódico, los argelinos confrontan un gran número de desafíos, entre estos el interés supremo, con toda evidencia, de preservar la estabilidad y la cohesión nacional.
En tal sentido, consideró que los políticos y representantes de la sociedad civil deberían tener como prioridad esos aspectos, ante la advertencia del jefe del Ejército de las amenazas de grupúsculos internos que desearían subvertir el orden y conducir al caos.
— NNN-PRENSA LATINA