DAMASCO, 9 dic (NNN-TELESUR) — Un grupo de hombres armados, pertenecientes a movimientos terroristas liderados por Hayat Tahrir al-Sham (HTS), irrumpieron en la embajada iraní en Damasco luego de su entrada en la capital siria durante la noche del pasado sábado y la caída del Gobierno de Bashar al-Asad.
Según videos difundidos en las redes sociales, los miembros de grupos radicales provocaron severos daños en la sede diplomática: rompieron cristales, allanaron las oficinas y causaron perjuicios al inmueble y bienes de la embajada.
También arrancaron las imágenes de los mártires, general iraní Qassem Suleimani y el líder de la Resistencia de Líbano (Hezbolá), Hassan Nasrallah, que estaban ubicados en el exterior de la misión diplomática.
Al parecer, los diplomáticos habían evacuado la instalación antes de que se produjera el asalto a la sede, por lo que no se reportaron al personal.
El asalto a la embajada iraní en Damasco se produjo luego de que los grupos armados extremistas tomaran el control de Damasco, patrocinados por Estados Unidos, Israel y Türkiye.
Fuentes militares aseguraron a los extremistas que el presidente sirio, Bashar Al-Assad, abandonó el país a bordo de un avión con destino desconocido. Por su parte, el primer ministro Mohammad Ghazi al Jalali llamó el domingo a celebrar elecciones libres para permitir a su pueblo decidir su liderazgo y se comprometió a trabajar con los opositores en una transición ordenada.
De acuerdo con una entrevista concedida al canal de televisión Al Arabiya, Jalali manifestó estar en contacto con el cabecilla del HTS, Abu Mohammad al Golani, quien era buscado por terrorismo por la Justicia de los EE. UU. y ahora es presentado por medios hegemónicos como un «rebelde moderado» para hablar de la gestión del actual período de transición.
— NNN-TELESUR