EL CAIRO, 1 nov (NNN-TELESUR) — El Jeque Dr. Akram Sabri, jefe del Consejo Islámico Supremo en Jerusalén, afirmó que miles de refugiados palestinos dependen de los servicios que brinda la Unrwa, por lo que el cierre de sus oficinas los privaría de ellos y agravaría su crisis humanitaria.
El jueves, en El Cairo, la Liga Árabe condenó la decisión del Estado sionista de Israel de cerrar las oficinas de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (Unrwa) tras meses de descalificaciones para enlodar su prestigio, vincularla al terrorismo y expulsarla de los territorios palestinos ocupados.
Mediante un comunicado, el organismo expresó que “analizará la respuesta árabe conjunta a las peligrosas leyes ilegales aprobadas por la Knéset (Parlamento) israelí, que prohíben las actividades de la Unrwa en el territorio palestino ocupado, incluida la ciudad de Jerusalén este”.
Ahmed Abuholy, representante de Palestina ante la Liga, hizo un llamado a los 22 Estados miembros sobre la necesidad de actuar y rechazar las decisiones israelíes, las cuales que van en contra del derecho internacional.
Abuholy subrayó la importancia de que la comunidad internacional condene las acciones de Tel Aviv y aseveró que la ocupación busca que los palestinos pierdan el derecho de regresar a su tierra.
El pasado lunes, la Knéset israelí aprobó dos leyes con el objetivo de cerrar las oficinas de la Unrwa en Jerusalén este, así como limitar sus operaciones en Gaza y Cisjordania.
Varios países consideran que la decisión de Israel forma parte de una guerra más amplia contra los palestinos para exterminar a la población, teniendo en cuenta que la situación en esos territorios ya es insostenible.
Una vez más, las acciones de Tel Aviv están encaminadas a privar a los refugiados palestinos de los pocos servicios básicos a los que pueden acceder de forma precaria y con mucha escasez, como la educación y la salud.
El Jeque Dr. Akram Sabri, jefe del Consejo Islámico Supremo en Jerusalén, afirmó que miles de refugiados palestinos dependen de los servicios que brinda la Unrwa, por lo que el cierre de sus oficinas los privaría de ellos y agravaría su crisis humanitaria.
Desde hace meses la entidad sionista emprendió una feroz campaña para demonizar a la Unrwa, a la que acusó en escenarios políticos de estar vinculada al terrorismo. Las acusaciones fueron ampliamente divulgadas por la mediática del sionismo y de países occidentales que apoyan política y militarmente a Tel Aviv.
En paralelo, con pleno conocimiento y de modo deliberado, el ejército de ocupación bombardeó escuelas, almacenes y otras instalaciones de la referida agencia de la ONU, además de asesinar a cientos de sus funcionarios en la Franja de Gaza.
— NNN-TELESUR
