KINSHASA, 23 oct (NNN-PRENSA LATINA) — El presidente de la República Democrática del Congo (RDC), Félix Tshisekedi, dialogó con el ministro de Justicia, Constant Mutamba, y representantes de la oficina del Consejo Superior de la Magistratura (CSM), informaron el martes.
El encuentro, ocurrido el lunes en la Ciudad de la Unión Africana, en Kinshasa, transcurrió por más de tres horas y estuvo centrado en los desafíos en este ámbito y la evaluación de las reformas que se implementan actualmente en el sector, refirió la cuenta de la Presidencia en X.
El presidente del Tribunal Constitucional y de la oficina del CSM, Dieudonné Kamuleta, declaró sobre el diálogo que discutieron todas las cuestiones que afectan a la nación congoleña y, en particular, a la justicia, con vistas a mejorar su administración.
En tanto, Mutamba manifestó que el presidente dio indicaciones precisas para mejorar la administración de justicia, lo cual redunda en beneficio del pueblo.
Aunque no hubo más detalles sobre las conversaciones, probablemente surgieran en el debate las diferencias entre el Ministerio de Justicia y el CSM, cuyas contradicciones arreciaron luego del intento de fuga de la prisión central de Makala, el 2 de septiembre, donde murieron 129 personas.
Tras los sucesos, el ministro dictó medidas de emergencia como la prohibición de enviar detenidos tanto a Makala como a la prisión de Ndolo, pues el hacinamiento de la población penal resultó una de las causas del incidente.
Mutamba tampoco dudó en calificar el intento de fuga como un “acto de sabotaje premeditado” en medio de un proceso de implementación de la política gubernamental de descongestión de las prisiones y de mejora de las condiciones carcelarias.
A esto se sumaron las declaraciones del viceministro de Justicia, Samuel Mbemba, quien señaló que el mal trabajo de los magistrados estaba en el origen de los sucesos.
La oficina del CSM respondió con un comunicado en el que refirieron que los arrestos y detenciones por parte de los jueces son una respuesta legal y apropiada para garantizar la seguridad pública; además de exhortar a la construcción de prisiones.
Añadieron que las palabras de Mbemba pueden exponer a los magistrados a la venganza popular, a pesar de la existencia de un marco de concertación entre el CSM y el Ministerio de Justicia, foro apropiado para tratar las cuestiones relativas a la administración de justicia.
El ministro continuó acusando a los magistrados de enviar detenidos a la prisión central de Makala sin tener en cuenta la capacidad de la cárcel, lo cual volvió a catalogar como sabotaje al proceso de descongestionamiento, donde muchos de los liberados son personas que permanecen por largos periodos de tiempo detenidos sin haber sido juzgados.
La controversia ha seguido latente, si bien bajaron tensiones y el programa de descongestión continuó sin retrocesos.
— NNN-PRENSA LATINA
