BUENOS AIRES, 30 ago (NNN-CUBADEBATE) — Una brutal represión de la Policía Federal contra una manifestación encabezada por la Unión de Trabajadores Jubilados en Lucha (UTJL) y organizaciones dejó un saldo de decenas de ancianos golpeados, a quienes les arrojaron en la cara gas pimienta con un nuevo químico que produce quemaduras cuando rechazaban el veto del presidente Javier Milei a la ley, votada por diputados y senadores, para aumentarles su pensión y continuar con la movilidad, que es la actualización de los haberes de acuerdo con la inflación.
Los efectivos comenzaron a empujarlos para que subieran a la banqueta, utilizando el protocolo antipiquetes (ilegal constitucionalmente) de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y para impedirles marchar desde el Congreso a Plaza de Mayo. “Nos golpearon, nos empujaron, nos echaron gas pimienta directo a la cara, es una locura esto, como si estuviéramos en la dictadura”, dijo a la televisión uno de los jubilados.
Estos incidentes indignaron a la población y a los diputados, ya que la manifestación se convocó después de una reunión de la UTJL y otras organizaciones de jubilados, a los que se unieron dirigentes de movimientos sociales. Estaban presentes diputados como el jefe del bloque opositor Unión por la Patria (UP), Germán Martínez, y Nicolás del Caño, del Frente de Izquierda (FT), quienes denunciaron la actuación de la Policía Federal.
Esto se produce en otra semana que empezó muy compleja, cuando avanza una dura pelea interna en la oficialista La Libertad Avanza (LLA), cuyo bloque, que es minoría, se va reduciendo con la renuncia de algunos legisladores. El miércoles lo hizo la diputada Lourdes Arrieta, quien denunció cómo se preparó la visita de seis diputados a los militares condenados y detenidos por crímenes de lesa humanidad, en un plan arreglado por el cura Javier Olivera Ravasi, al diputado Beltrán Benedict y al exmarino Alfredo Astiz, quien junto con otros verdaderos hitos del terrorismo de Estado aplicado durante la pasada dictadura, les entregaron un proyecto de ley (un decretazo en realidad) para que los liberen.
Mientras, continúan las diferencias entre Milei y su vicepresidenta Victoria Villarruel, quien, durante un acto que convocó en el Senado, utilizando el Día Internacional de la Conmemoración a las Víctimas del Terrorismo, advirtió que “todos los montoneros (grupo armado de los años 60-70) tienen que estar presos, respondiendo por ensangrentar nuestra nación”.
Prometió abrir “todas las causas de víctimas del terrorismo (..), asumí el compromiso por la memoria completa desde los 28 años y, aunque muchas cosas cambiaron, esta ha sido la lucha más importante de mi vida”, dijo y advirtió que se dará “la reapertura de todas las causas de víctimas del terrorismo para que sea la Justicia la que haga lo que debió hacer hace más de 20 años”.
La presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, dijo que “estamos viviendo un momento muy difícil, riesgoso y también muy peligroso, porque la maldad se contagia”. Sostuvo que teme cada vez que sale de su casa y que el Gobierno busca “implantar el odio al revés, o sea, de que las víctimas fueron los que nos dejaron muertos a 30 000 personas, y además desaparecidos, y el robo de bebés y de bienes”.
En este ambiente de caos y confusión, con la población cada vez más alterada, faltaba escuchar la exposición del ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, citado para explicar a la Comisión de Mujeres y Diversidades de la Cámara de Diputados políticas oficiales como el cierre del Ministerio de la Mujer, y tantos otros organismos, que afectan gravemente a los familiares de víctimas del feminicidio y a la protección de mujeres amenazadas, a las que también dejarán sin refugio.
El ministro sorprendió al admitir que “la diversidad de identidades sexuales que no se alinean con la biología son inventos subjetivos”. Asimismo, dijo que su partido sostiene que “la violencia debe ser castigada sin importar el género del destinatario”. Aseguró que “esto está en la Constitución, la Biblia, el Corán, la ciencia, la naturaleza del ser humano”.
“Usted ha dicho una barbaridad, que desconoce las leyes que han ampliado derechos en los últimos 15 años en Argentina”, replicó el diputado de la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro, quien le respondió que solo le faltó decir que (las identidades sexuales no alineadas con la biología) están enfermas. “Como ministro de Justicia, usted no puede desconocer el artículo 75 inciso 23 de la Constitución nacional, que establece las cuestiones que hacen a la igualdad de trato de las mujeres”.
— NNN-CUBADEBATE
Por: Stella Calloni