NACIONES UNIDAS, 19 jul (NNN-UNIS) — Las manifestaciones de jóvenes que protestan por la carencia de empleos a los recién graduados continúan en Bangladesh con choques violentos entre los alumnos y las autoridades bengalíes.
Las movilizaciones, que estallaron hace dos semanas, han llevado a algunos estudiantes inconformes a enfrentarse a sus homólogos progubernamentales y a la policía en la capital, Dhaka, y en otras ciudades, dejando como saldo casi dos decenas de muertos, según informes extraoficiales
Los estudiantes protestan por las cuotas que reservan un tercio de los empleos públicos a los hijos de veteranos de la guerra de independencia de Pakistán de 1971, que se abolieron en 2018, pero se restablecieron a principios de este mes.
El portavoz de la ONU, Stephan Dujarric, informó el jueves que están muy atentos a los acontecimientos en Bangladesh.
“Seguimos llamando a ambas partes a la contención. Urgimos al Gobierno a que garantice un entorno propicio para el diálogo, y exhortamos a los manifestantes a comprometerse con ese diálogo para superar el impasse”, dijo en su encuentro diario con la prensa.
La violencia nunca es la respuesta, subrayó el portavoz.
“El secretario general, António Guterres, insta a la participación sustantiva y constructiva de la juventud para la construcción de un mundo mejor”, apuntó.
Dujarric también conminó a las autoridades bengalíes a trabajar los jóvenes con el fin de encontrar soluciones a los desafíos actuales y de aprovechar su energía y vitalidad para impulsar el desarrollo del país.
El gobierno bengalí cerró todas las universidades públicas y privadas después de que las protestas se volvieran letales el martes pasado. Según despachos de prensa, la cifra de decesos se elevaría a 19, además de que hay decenas de heridos.
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, también instó a las autoridades a dialogar con los estudiantes que exigen el fin del sistema de cuotas para los empleos públicos.
Türk afirmó en las redes sociales que todos los actos de violencia y uso de la fuerza, especialmente los que causan la muerte, deben ser investigados y sus autores deben rendir cuentas.
“La libertad de expresión y de reunión pacífica son derechos humanos fundamentales”, añadió.
— NNN-UNIS