LA PAZ, 28 jun (NNN-TELESUR) — El intento de golpe de Estado en Bolivia fue neutralizado, tras la denuncia realizada por el presidente Luis Arce y la movilización de la población en defensa de la democracia del país.
El mandatario se dirigió a la población que salió a la plaza Murillo, en La Paz, para agradecer a quienes se han mantenido firmes con la Constitución de la nación suramericana.
“Nosotros nos hemos mantenido aquí en Casa Grande, donde ustedes nos han puesto, porque los únicos que nos pueden sacar de aquí son ustedes, hermanas y hermanos. Quiero agradecerles que se han movilizado rápidamente, hay pronunciamientos de Gobiernos amigos que quiero saludar también”, declaró.
Además, aseguró que «nadie nos puede quitar la democracia que hemos ganado en las urnas».
“Queremos agradecerles. Estamos seguros, más todavía con esta presencia de todos ustedes aquí, que nosotros vamos a seguir trabajando” con el mandato del pueblo boliviano, expresó.
A su vez, el vicepresidente boliviano David Choquehuanca manifestó «queremos saludar el coraje, la valentía del pueblo boliviano y de los hermanos que se han concentrado una vez más en esta plaza».
“Nunca más el pueblo boliviano va permitir un golpe de Estado. Quiero valorar la valentía de nuestro presidente”, acotó.
A través de la red social X, el jefe de Estado alertó previamente que se registraron «movilizaciones irregulares de algunas unidades del Ejército Boliviano» e instó a respetar la democracia.
Luego envió un mensaje al pueblo boliviano junto a los ministros que conforman su gabinete, reiterando el llamado a defender la democracia.
“Necesitamos que el pueblo boliviano se organice y se movilice en contra del golpe de Estado y en favor de la democracia. No podemos permitir que una vez más intentonas golpistas se lleven vidas bolivianas. Queremos exhortar a todos a que defendamos la democracia y aquí estamos firmes en Casa Grande con todo el gabinete, con nuestras organizaciones sociales. Saludamos a las organizaciones sociales y las invitamos cordialmente a que nuevamente muestren el camino de la democracia al pueblo boliviano”, declaró.
Imágenes difundidas a través de teleSUR muestran alrededor de ocho tanquetas militares dentro de las cuales pueden verse uniformados armados.
Ciudadanos se han movilizado hasta la Plaza Murillo para evitar una ruptura constitucional y gritaron «golpistas, golpistas». En este lugar también se encuentran las sedes de la Casa del Pueblo, la Asamblea Legislativa Plurinacional y la Cancillería boliviana.
El vicepresidente de Bolivia, David Choquehuanca, también denunció este hecho “contra nuestro Gobierno democráticamente elegido”.
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, se presentó allí e intentó comunicarse con integrantes de uno de los vehículos militares, dentro del cual se encontraba el comandante general del Ejército, Juan José Zúñiga.
Del Castillo intentó conocer quién dio la orden de desplazar al contingente militar y le pidió explicaciones a Zúñiga. «Desmoviliza Zúñiga, va a ser peor. Estas a tiempo, Zúñiga, desmoviliza», le dijo el ministro.
El exmandatario de Bolivia, Evo Morales, también se unió a los mensajes denunciando que se lleva a cabo el golpe de Estado.
Según el corresponsal de teleSUR, Freddy Morales, es elevada la cantidad de militares que se encuentran en Plaza Murillo. Cerraron los ingresos a esta área e impiden el trabajo de los periodistas. Muchos de los militares están encapuchados. Además, indicó que se ha empleado gases lacrimógenos para dispersar a la población y periodistas que se encuentran allí.
Zúñiga ingresó al Palacio de Gobierno y expresó que todas las fuerzas están movilizadas», exigiendo un cambio total de gabinete. Luego retornó al interior de la tanqueta estacionada en Plaza Murillo.
Posteriormente, el ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño, manifestó que «lo que vamos a hacer los bolivianos es defender a toda Bolivia y a sus habitantes», recordando que ya se había retomado la democracia.
Por su parte, la ministra de la Presidencia, María Nela Prada, denunció «ante el pueblo boliviano y la comunidad internacional un intento de golpe de Estado aquí en el Estado Plurinacional de Bolivia», e informó que se «han tomado las cuatro esquinas, al interior de la plaza Murillo y en el frente del Palacio de Gobierno».
La ministra indica que en las afueras de la Asamblea Legislativa Plurinacional hay tropas tomando toda la calle que no permiten el ingreso a esa institución. La funcionaria subrayó que el pueblo boliviano se encuentra alerta “por nuestras hijas, hijos”.
“Esto lo debemos evitar”, así como que se vuelva a consumar en el país un golpe de Estado que pueda terminar en otras tragedias.
Por su parte, el corresponsal de teleSUR en Bolivia, Freddy Morales, indicó que el general Juan José Zúñiga había vuelto a la tanqueta sin ofrecer declaraciones, y recordó que la facción del Ejército conocida como Movimiento Colorado de Bolivia es la que custodia al presidente Luis Arce y el antiguo Palacio de Gobierno, conocido como Palacio Quemado.
“Este regimiento depende del general Zúñiga y el Ejército. Es un detalle que hay que tomar en cuenta, en un contexto donde la ministra de la presidencia ha advertido que se trata de un intento de golpe de Estado”, precisó.
De acuerdo con Morales, la tanqueta que transportaba al general Zúñiga comenzó a moverse. “Se puede observar que tiene una esterilla de balas, que maneja un militar desde la torreta de esta tanqueta”, indicó.
Asimismo, detalló que una de las tanquetas ha avanzado hacia el Palacio Legislativo, por la calle que conduce hacia Miraflores. «Ha avanzado como veinte metros aproximadamente, para empujar a las personas que se concentran en la esquina gritando contra lo que se vislumbra como un intento de golpe de Estado», describió.
Morales asegura además que la policía lanza gases lacrimógenos contra las personas que protestan en rechazo al intento de golpe de Estado.
Luego, el corresponsal de teleSUR reportó que Zúñiga salió de la tanqueta para anunciar la liberación de la expresidenta de facto, Jeanine Áñez; «ha señalado el nombre varias veces del exgobernador de Santa Cruz, el señor (Fernando) Camacho, quien está preso por el proceso de golpe de Estado de 2019 (…) Ha dicho que no quedará ni un preso político en Bolivia y que sus camaradas que tienen detención carcelaria o preventiva domiciliaria, dentro del marco del proceso de golpe de Estado de 2019, también serán liberados».
Bolivia fue escenario de un golpe de Estado en noviembre de 2019. Fue organizado por EE. UU. y la derecha local con la complicidad de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Posteriormente, el jefe de Estado juramentó al nuevo Alto Mando Militar del país.
— NNN-TELESUR