NAIROBI, 17 de abril (NNN-TELESUR) — Dos médicos cubanos que trabajaban desde julio pasado en Lamu, condado del este de Kenia fronterizo con Somalia al norte, fueron evacuados el fin de semana, informó el diario The Star, citando a la titular distrital de Sanidad, Anne Gathoni.
Los cooperantes cubanos, cirujano ortopédico y médico principal, abandonaron Lamu apenas un par de días después de que dos colegas suyos fueran secuestrados en Mandera, noreste de Kenia, por presuntos miembros del grupo Al Shabab.
Según la funcionaria de Sanidad, los dos necesitan recibir asesoramiento, traumatizados como están por lo ocurrido a sus colegas en Mandera. Una fuente de seguridad dijo a The Star que “han sido retirados por el gobierno, al igual que todos los demás en los condados fronterizos como Wajir y Garissa”.
El comisario del condado de Lamu, Joseph Kanyiri, confirmó el traslado, pero también cuestionó su relación con el incidente de Mandera. “Nuestros médicos solo han sido llamados para una reunión informativa. Ya llevaban algún tiempo sobre el terreno. Dudo que tenga algo que ver con Mandera, que está a kilómetros de distancia. Es normal que los que trabajan en el campo vayan para consultas a Nairobi de vez en cuando, nosotros incluidos”, dijo Kanyiri.
El Ministerio de Salud Pública de Cuba confirmó el 12 de abril que el médico general Assel Herrera Correa y el cirujano Landy Rodríguez Hernández, fueron secuestrados en Kenia. Fuentes policiales del condado de Mandera, donde ocurrió el secuestro, suponen que los especialistas de salud cubanos fueron trasladados a Somalia, donde Al Shabab tiene sus bases.
Ambos médicos forman parte de un contingente de 100 profesionales de la salud cubanos que prestan sus servicios en Kenia. La Habana estableció de inmediato canales de comunicación con Nairobi para atender esta situación y creó un grupo de trabajo gubernamental para dar seguimiento al asunto.
Al Shabab ha perpetrado numerosos ataques dirigidos contra las tropas gubernamentales, la Misión de la Unión Africana en Somalia (Amisom) y las operaciones humanitarias de la ONU. El grupo, que se empeña en imponer en Somalia una versión de la ley sharia, también ha reivindicado varios atentados terroristas en los países vecinos del este de África, incluyendo la matanza en el centro comercial Westgate en Nairobi, Kenia, en septiembre de 2013.
— NNN-TELESUR