ASUNCIÓN, 16 de abril (NNN-PRENSA LATINA) — Las inundaciones por la crecida del río Paraguay dejaron un saldo 88 mil damnificados y provocaron una de las mayores crisis de los últimos 50 años en el país, informaron hoy fuentes gubernamentales.
Ante la catástrofe, que ocasionó daños considerables en los asentamientos ubicados a todo lo largo de las márgenes del afluente, el gobierno decidió declarar emergencia ambiental.
Según las últimas estadísticas, tan sólo en la capital se contabilizan 30 mil desplazados, mientras, plazas y calles se convierten en refugios improvisados por la escasa disponibilidad de albergues para los afectados.
Iván Allende, director del Área Social de la Municipalidad de Asunción, en declaraciones al diario La Nación explicó que esa situación podría prolongarse hasta los meses de junio y julio por la crecida natural del río y más tarde con las lluvias de octubre.
El funcionario alertó que el estado no cuenta con espacios disponibles para habilitar locales con las condiciones mínimas indispensables para los damnificados y otras fuentes aseguran que en algunas localidades los equipos de rescate del Gobierno o el Ejército, no son suficientes.
Solo en uno de los tres departamentos del Chaco, Presidente Hayes, más de 25 mil personas de comunidades indígenas afectadas están a la espera de alguna ayuda humanitaria, denunciaron a los medios locales líderes regionales que viajaron a la capital en busca de apoyo gubernamental.
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